Una vez que esto sucede, la sangre se acumula en las piernas debido a la gravedad y las venas se inflaman debido a la presión. Estas venas dilatadas pueden poner en riesgo la nutrición de la piel y causar eczema, inflamación o incluso úlceras en la parte inferior de la pierna. El líquido puede derramarse y causar inflamación dolorosa o incómoda. Estas venas dilatadas pueden sangrar, irritarse o causar dolor, con las actividades regulares. En los casos menos severos, una persona puede desarrollar venas superficiales más pequeñas conocidas como arañas vasculares u otras un poco más grandes conocidas como telangiectasias, que también puede ser dolorosas o incluso pueden ser una fuente de sangrado.
Hay muchas partes del cuerpo que pueden ser afectadas por las enfermedades venosas, esto incluye las venas varicosas, inflamación de las piernas, daño y úlceras en la piel. Si usted y su doctor han agotado todas las opciones medicas, el siguiente paso sería consultar una o más de las siguientes opciones, bien en la misma cita o en citas posteriores: ablación o eliminación de las venas enfermas, tratamiento de las venas varicosas de más grande superficie, y/o tratamiento de las venas más pequeñas – las telangiectasias y arañas vasculares. Cada uno de estos procedimientos se ofrece en nuestro consultorio.
Permítanos enseñarle unos útiles consejos para minimizar las enfermedades venosas.